El líder opositor venezolano Juan Guaidó dijo confiar en que Estados Unidos mantenga presión contra el gobernante socialista Nicolás Maduro independientemente de si el presidente Donald Trump es reelecto el próximo 3 de noviembre.
¡Sé el primero en enterarte! Únete gratis al grupo de WhatsApp de bancaynegocios.com y recibe al instante las noticias más relevantes.
Clic Aquí
«La gran apuesta hoy de Maduro, con la cual engaña a su entorno» es «hacer ver que si pierde o si gana alguna opción en los Estados Unidos a ellos les podría ir un poquito mejor», comentó Guaidó, reconocido como presidente encargado de Venezuela por Washington y medio centenar de gobiernos.
«Tu problema no es con la Casa Blanca nada más, tu problema es con el Departamento de Justicia (…), estás señalado por narcotráfico y por terrorismo», agregó en una entrevista con el capítulo de Transparencia Internacional en el país caribeño, dirigiéndose al mandatario chavista.
Presidente del Parlamento, único poder controlado por la oposición en Venezuela, Guaidó respondió así a una pregunta sobre si una eventual derrota electoral de Trump ante el demócrata Joe Biden ponía en peligro el respaldo estadounidense a una propuesta de establecer «un gobierno de emergencia», sin Maduro, que lleve a «elecciones libres».
Estados Unidos fue el primer país que reconoció a Guaidó cuando reclamó en enero de 2019 la presidencia interina de Venezuela, después de que la mayoría opositora legislativa declarara «usurpador» a Maduro acusándole de haber sido reelecto en un fraude.
La justicia norteamericana acusó de «narcoterrorismo» al mandatario y ofreció 15 millones de dólares de recompensa por él.
«Yo tengo que agradecer profundamente a la administración del presidente Trump» en «respaldo a la causa venezolana», manifestó este viernes Guaidó.
El dirigente encabeza un boicot de los principales partidos políticos de oposición contra las elecciones del 6 de diciembre en Venezuela para elegir un nuevo Parlamento, alegando que no existen condiciones.
El retiro de una treintena de agrupaciones opositoras se produjo luego de que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), de línea oficialista, nombrara nuevas autoridades electorales, una atribución de la unicameral Asamblea Nacional.
La corte, después, anuló las directivas de varios partidos rivales de Maduro, incluyendo el de Guaidó, y entregó el control de esas organizaciones a adversarios del jefe parlamentario.
Estados Unidos anunció que desconocerá esas elecciones y la Unión Europea pidió aplazarlas por considerar que no garantizan un proceso «transparente».