Pagar por un desayuno en Venezuela cuesta más que un día de trabajo

De acuerdo con cálculos desarrollados bajo un índice de la agencia Bloomberg que mide el tiempo necesario que debe trabajar una persona para comprar los alimentos que conforman un desayuno, de acuerdo con su ubicación geográfica, los venezolanos necesitan trabajar por más de una jornada para cubrir la primera comida del día.

De acuerdo con este instrumento, específicamente los venezolanos necesitan cerca de nueve horas de trabajo para poder costear un desayuno.

Los residentes de Abu Dhabi, Osaka y Zurich pueden ganar dinero suficiente en tan solo cinco minutos para poder comprarse un desayuno; los habitantes de Ghana, por ejemplo, ameritan una hora para poder hacerlo, pero los venezolanos en Caracas necesitan más de un día de trabajo para comprarse la primera comida de la jornada.

Bloomberg estableció el presupuesto de un desayuno como una referencia para conocer las economías más ricas del mundo.

El índice de Bloomberg calcula el costo promedio y la asequibilidad de un desayuno típico – una taza de leche entera, un huevo, dos rebanadas de pan tostado y un trozo de fruta – para 129 centros financieros mundiales y regionales.

Las clasificaciones se basan en los precios de mercado de los últimos 12-18 meses de Numbeo.com, una base de datos en línea de estadísticas de ciudades y países aportadas por los usuarios.

El índice revela amplias brechas de asequibilidad entre las ciudades de arriba y abajo en algunas regiones económicas.

En Suiza, Zurich y Ginebra, el desayuno cuesta algo más del 1% del salario diario; mientras que los ucranianos en Kiev deben desembolsar alrededor del 6%.

En Asia, el costo es inferior al 1% en Osaka, y en Hanoi, Vietnam, se necesita el 12%.

La disparidad es más amplia en América Latina: mientras que los ciudadanos de Monterrey (México) deben desembolsar solo 2,4% de su salario diario para adquirir un desayuno; los caraqueños en Venezuela necesitan 111% de su ingreso diario para poder desayunar.

Lo que significa que con un solo día de trabajo los venezolanos solo pueden comprar un desayuno.

Bloomberg seleccionó los ítems de su índice porque son productos agrícolas ampliamente disponibles cuyos precios permiten comparaciones entre ciudades.

El pasado 16 de diciembre la compañía estadounidense especializada en finanzas creó el índice “café con leche” para hacerle seguimiento al fenómeno de la inflación en el país suramericano.

Se trata del precio de una taza de café con leche, bajo una concepción similar a la del índice Big Mac, que a pesar de no ser científico, permite medir el valor de un elemento que es accesible para la gran mayoría de los venezolanos.

El índice Café Con Leche debutó en esa oportunidad con una tasa anual de 1.526 %, como resultado del incremento que sufrió de 450 bolívares (USD$ 0,18) por taza a 1.100 bolívares (USD$ 0,44).