Airbus criticó decisión de gobierno español que le priva de una parte de mercado

El grupo aeronáutico Airbus criticó el sábado la decisión del gobierno español de preferir a la compañía española de defensa Indra como coordinador de la industria local dentro del programa del futuro avión de combate europeo.

España se unió en junio pasado al programa francoalemán de Sistema de Combate Aéreo Futuro (SCAF), que en torno a 2040 incluirá a un nuevo avión de combate, satélites, drones y otros aviones militares. A finales de agosto, España confió la coordinación de los industriales españoles dentro del SCAF a Indra y no a Airbus España.

En una entrevista al diario El Confidencial, Guillaume Faury, nuevo director ejecutivo de Airbus, recuerda que su compañía, que monta en España la mayor parte de sus aviones militares, ha trabajado en el proyecto SCAF desde sus inicios.

«Hemos estado implicados como uno de los dos socios clave desde el principio y estamos ahora en el centro de las discusiones sobre la arquitectura del conjunto del sistema. Es realmente difícil imaginar a alguien más, llegado de fuera, y no teniendo estas capacidades en aviones, drones, satélites, sino al nivel de equipos o sensores. No quieres a un fabricante de ruedas o de ordenadores diseñando tu coche. Quieres un fabricante de coches», explica.

Faury emprendió esta semana una gira por España para intentar que el gobierno reconsidere su decisión. Pero en una entrevista publicada también en El Confidencial, el secretario de Estado de Defensa español, Angel Olivares, deja pocas esperanzas de un cambio, al menos a corto plazo.

«Esta no es una decisión coyuntural, que se pueda cambiar de la noche a la mañana», comentó Olivares. «Se ha decidido que sea Indra y seguimos insistiendo en que vayan de la mano con Airbus y el resto de la industria. En la última reestructuración, la dirección de Airbus España ha dejado de participar en el comité ejecutivo de Airbus Grupo, por primera vez. La importancia relativa de España dentro de Airbus ha ido disminuyendo y la consejera española no fue nombrada con el apoyo del Gobierno», agregó.